MEMORIA, TERRITORIO Y
CIUDADANÍA
En la medida en que las sociedades y el hombre mismo ha
ido avanzando y desarrollándose en sus espacios geográficos, ha sido necesario
registrar los cambios como fuente invaluable e inagotable de conocimiento. Para
ello existen en la actualidad un entramado de ciencias que confluyen y se
sustentan entre sí con el propósito de estudiar cada aspecto de la vida del ser
humano y su interacción con el medio físico en el cual se desenvuelve.
Concretamente, todas estas ciencias conforman un grupo al cual se ha denominado
“Ciencias Sociales”, y dentro de ellas la historia tiene un papel
preponderante, sin menoscabo del propósito de las demás que integran el campo
de la investigación social. Es la historia la encargada de estudiar todo lo
relativo al ser humano, en cuanto a su trascender en el tiempo y espacio se
refiere, con los cambios positivos o negativos a los cuales hayan sido
sometidos.
Esta tarea, como afirma Marc Bloch (1987), está lejos de
significar que “la Historia es la ciencia del pasado” (p. 22), por el contrario
“…es la ciencia que estudia al hombre a través del tiempo…” (Juan Brom, 1980; p. 20), lo que se traduce
en un quehacer fundamental para el conocimiento, sostén y progreso de las
sociedades actuales. Valiéndose de múltiples métodos, técnicas e instrumentos,
la historia es una ciencia social que constantemente se actualiza en función de
los cambios sociales para adaptarse a los avances científicos y tecnológicos
del momento generando a su vez diversos métodos de investigación que permitan
enriquecer el saber histórico de los pueblos y comunidades.
En atención a lo anterior, el sistema Educativo venezolano
consagrado en el Artículo 102 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela CRBV (1999) como “…un derecho
humano y un deber social fundamental, democrática, gratuita y obligatoria...”
(p. 15) y en el Artículo 99 en lo referente a los valores de la cultura,
establece que los mismos “…constituyen un bien irrenunciable del pueblo
venezolano y un derecho fundamental que el Estado fomentará y garantizará,
procurando las condiciones, instrumentos legales, medios y presupuestos
necesarios […] a la vez que …El Estado garantizará la protección y
preservación, enriquecimiento, conservación y restauración del patrimonio
cultural, tangible e intangible, y la memoria histórica de la Nación…” (p. 12)
En este propósito, las Ciencias Sociales y en particular
la Historia y la Geografía de Venezuela se han incluido en el Currículo
Nacional Bolivariano como un área de aprendizaje de interés social, cultural,
de formación integral y estratégica en el empeño de la construcción de una
patria libre y soberana y de una nación ilustrada y preparada para “…el
ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad
justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo[
… ]en donde, …la educación y el trabajo son los procesos fundamentales para
alcanzar dichos fines...” (CRBV 1999, Artículo 03). Todo lo anterior establece
las bases político-legales de la educación específicamente en la rama de las
ciencias sociales y todas las disciplinas que las sustentan, y dentro de ellas
como área fundamental la Historia de Venezuela juega un papel preponderante en
la formación y preservación de la memoria histórica de los jóvenes y
adolescentes, del fomento de nuestra identidad nacional y del reconocimiento de
nuestras raíces como elemento principal del conocimiento del pasado para
comprender el presente y orientarnos en el futuro.
Es claro que, el desarrollo integral de los educandos se
basa en la conjugación de un conjunto de ciencias y/o disciplinas que brindan
al sujeto los conocimientos básicos requeridos para desenvolverse en la
sociedad como un ciudadano consciente, con identidad nacional, productivo y
capaz de desarrollar y aprovechar los recursos disponibles en el medio,
cuidando y preservando los mismos en función de establecer un patrimonio
hereditario para otras generaciones. Sin embargo, producto de la
transculturización impuesta desde los grandes centros de poder extranjeros, la
función que debe cumplir la educación ha bajado en nivel y en calidad, razón
por la cual en ejercicio de la participación protagónica y el amplio sentido
democrático que caracteriza al pueblo venezolano, se realizó la “Consulta
Nacional por la Calidad Educativa” con una participación histórica de 7.233.489
personas consultadas en los 24 estados, 335 municipios y 1.136 parroquias del
país.
Asimismo, en los 20.748 planteles educativos de
dependencia oficial y privada consultados, las comunidades educativas emitieron
su opinión en relación a diez temas de interés fundamental para la
transformación educativa en el país; los mismos fueron los siguientes: 1- la
inclusión como política educativa; 2- una pedagogía del amor, el ejemplo y la
curiosidad; 3- la formación de los maestros y maestras; 4- las escuelas
territorios democráticos y de paz; 5- un sistema que proteja y oriente a los
niños, niñas y jóvenes; 6- una relación pedagógica entre la escuela, la familia
y la comunidad; 7- una mejor educación media general y media técnica; 8-
edificaciones escolares pedagógicas y pertinentes; 9- evaluar la calidad
educativa y 10- reinstitucionalizar el MPPE.
En este contexto, en la temática referida a la formación
de los maestros y maestras,…hubo consenso nacional sobre la necesidad de
mejorar la formación docente. Piden que los maestros y maestras tengan dominio
conceptual de todos los contenidos, conozcan el acontecer nacional e internacional,
fomenten la identidad nacional, conozcan y apliquen métodos de enseñanza
innovadores, manejen las nuevas tecnologías, estimulen un aprendizaje creativo,
contextualizado, vinculado con la familia y la comunidad… por su parte, el tema
dirigido hacia una mejor educación media general y media técnica, …todos los
sectores hicieron énfasis en la necesidad de diseñar y acordar el currículo
nacional, pero que en lo inmediato se proceda a la actualización de los
programas y a la transformación de las dinámicas de la educación media general
y media técnica…
En efecto, las Ciencias Sociales en el sistema educativo tradicional han venido enfrentando una serie de contratiempos y reveses que poco a poco han ido mermando su importancia e interés por parte de las y los jóvenes. Ello se debe a que colectivamente se ha forjado la idea que son materias teóricas y de poco interés científico, lo que se traduce en la colectividad estudiantil en áreas de curso obligatorio pero no de aprendizaje relevante. A la par de ello, la creciente transculturización imperante en nuestra sociedad hace que el estudio en particular de la historia se vea comprometido por el bombardeo de información externa que reciben a diario los estudiantes. En respuesta a lo anterior, los profesores de Historia de Venezuela y en general de todas las disciplinas, en los ambientes educativos, tienen la desafiante tarea de lograr retomar el interés de los estudiantes por el estudio de dicha asignatura para lo cual es necesario afianzar en los educandos la comprensión de la importancia que reviste en todos los ámbitos de la vida, el estudio de las temáticas históricas, de la identidad nacional, de lo autóctono, del nacionalismo sin perder de vista el contexto mundial, pero consciente de quienes somos y de dónde venimos.
En atención a lo anterior, surge la Micromisión Simón Rodríguez con el propósito de formar profesores especialistas en áreas de interés estratégico que contribuyan a dar respuestas a las necesidades expresadas en la consulta. En este orden, el área Memoria, Territorio y Ciudadanía se consolidan como componentes fundamentales en el estudio y el conocimiento de la historia y la geografía como elementos de suprema relevancia para la comprensión de nuestra realidad como pueblo, el afianzamiento del sentido de pertenencia y el concepto de patria.
Este esfuerzo se fundamenta en nueva metodología, en una nueva concepción del hecho educativo que, no solo se inspira en los postulados del maestro Simón Rodríguez, sino que asume el reto histórico de llevarlos a la práctica; en función de superar la herencia de un pasado que estaba representado en una educación elitista, bancaria, memorística y repetitiva, transformando a la educación venezolana en una verdadera palanca para el crecimiento y la grandeza de todo nuestro pueblo. Para ello, es necesario centrar el proceso de enseñanza aprendizaje en un intercambio de saberes, en una relación dialéctica y dialógica que se fundamente en la investigación y el estudio crítico y reflexivo de la Geohistoria desde la pedagogía crítica y el principio Robinsoniano de “aprender enseñando y enseñar aprendiendo”.
En atención a lo anterior, surge la Micromisión Simón Rodríguez con el propósito de formar profesores especialistas en áreas de interés estratégico que contribuyan a dar respuestas a las necesidades expresadas en la consulta. En este orden, el área Memoria, Territorio y Ciudadanía se consolidan como componentes fundamentales en el estudio y el conocimiento de la historia y la geografía como elementos de suprema relevancia para la comprensión de nuestra realidad como pueblo, el afianzamiento del sentido de pertenencia y el concepto de patria.
Este esfuerzo se fundamenta en nueva metodología, en una nueva concepción del hecho educativo que, no solo se inspira en los postulados del maestro Simón Rodríguez, sino que asume el reto histórico de llevarlos a la práctica; en función de superar la herencia de un pasado que estaba representado en una educación elitista, bancaria, memorística y repetitiva, transformando a la educación venezolana en una verdadera palanca para el crecimiento y la grandeza de todo nuestro pueblo. Para ello, es necesario centrar el proceso de enseñanza aprendizaje en un intercambio de saberes, en una relación dialéctica y dialógica que se fundamente en la investigación y el estudio crítico y reflexivo de la Geohistoria desde la pedagogía crítica y el principio Robinsoniano de “aprender enseñando y enseñar aprendiendo”.
Misión: Orientar a la construcción de una nueva sociedad, desde la premisa y la necesidad histórica del nacimiento de un hombre y una mujer nueva que garanticen las transformaciones económicas y sociopolíticas que enrumben definitivamente a nuestro país por la senda del socialismo liberador, la democracia plena y el desarrollo humano y humanístico que reclaman los nuevos tiempos.
Visión: Ser un instrumento al servicio de los pueblos basado en los principios de independencia, igualdad, libre determinación y no intervención en los asuntos internos, solución pacífica de conflictos, cooperación, respeto de los derechos humanos y solidaridad en la lucha por la emancipación y bienestar de la humanidad.